La oración a Dios es comunicarse, es nuestro medio para contarle nuestros problemas, nuestras aflicciones, lo que queremos lograr o simplemente darle gracias por crearnos; darnos una maravillosa vida terrenal y traernos cosas buenas, como bienestar.
Nosotros estamos conformados por la parte carnal o material que es nuestro cuerpo y nuestro otro fragmento que es lo espiritual, llamado alma, estos dos fragmentos es lo que nos hace un ser humano.
Pero estos dos fragmentos aunque son muy distintos, se complementan, y estos dos integrantes tienen necesidades, estos requieren alimentarse, para fortalecerse, y las dos requieren de una buena alimentación, aunque muchas veces le damos mucho más importancia a la carnal que a la espiritual.
¿Por qué debemos orar a Dios?
La comunicación con Dios como ya antes mencionado, nos da el alimento espiritual que necesitamos, también es una forma de tener una conversación con nuestro amado Padre, ya que el también necesita comunicarse con nosotros, y a veces por falta de comunicación con nuestro padre, caemos en tentaciones que muchas veces no tenemos la fuerza necesaria, para no caer en tentaciones del inicuo.
¿Qué debemos tomar en cuenta al rezarle?
- Para comunicarnos con Dios debemos tener en cuenta, que nuestra actitud debe ser humilde, al dirigirnos hacia él, ya que conoce lo que hay en nuestro corazón y este no debe ser orgulloso
- Debemos mostrar que confiamos en él, y que el siempre mejorará nuestras vidas
- Decir lo que sentimos y explicar lo que necesitamos, él sabe que la vida en la tierra puede ser muy difícil y que solicitamos mucho de su bendición y ayuda para sentirnos mejor.
- Perdonar a otros, no solo basta con ser bondadoso, sino que hay que también ser compasivos, y perdonar a aquel que nos hace daño o nos hiere, ya que nuestro señor es un Dios del perdón y el siempre estará dispuesto a perdonarnos.
- Le pedimos a Dios que nos permita mantenernos fuertes ya que el mal siempre abunda, que se haga justicia a la tentación y el mal.
Una forma también para comunicarse con Dios, también puede ser con la intersección de la Oración de San Benito.
¿Por qué orarle?
La oración a Dios así como las Oraciones Poderosas, nos acerca a abrir nuestros corazones, este nos ayuda a saber cuál es nuestro verdadero propósito en nuestra vida, tal vez en una vida pasada, vivíamos en manos del inicuo, sin conocer el camino de la espiritualidad sin saber que haríamos en el transcurso de nuestra vida, pero llega un momento en el que encontramos el verdadero camino y nos damos cuenta de que Dios debe ser glorificado, porque al pedirle recibiremos cosas buenas siempre y cuando lo hagamos
Mediante su nombre y no solo eso, Cuando su amado hijo vivió en la tierra, aun siendo de carne y hueso tuvo también tentaciones, pero aun así se mantuvo de pie, y no solo porque era perfecto si no porque también mantenía una buena relación con su padre, mediante oraciones.
La oración a Dios nos hace sentir paz y nos ayuda a recibir una sanidad física como espiritual, una buena razón para ello es que teniendo una constante fe en él, nos convierte en sus hijos más leales.
La mejor oración a Dios
“¡Oh Señor!, tú has creado todas las cosas. Tú les has dado su ser y las has puesto en equilibrio y armonía. Están llenas de tu misterio, que toca el corazón si es piadoso.
También a nosotros, ¡oh Señor!, nos has llamado a la existencia y nos has puesto entre ti y las cosas. Según tu modelo nos has creado y nos has dado parte de tu soberanía. Tú has puesto en nuestras manos tu mundo, para que nos sirva y completemos en él tu obra. Pero hemos de estarte sometidos, y nuestro dominio se convierte en rebelión y robo si no nos inclinamos ante ti, el único que llevas la corona eterna y eres Señor por derecho propio.
Maravillosa, ¡oh Dios!, es tu generosidad. Tú no has temido por tu soberanía al crear seres con poder sobre ellos mismos y al confiar tu voluntad a su libertad. ¡Grande y verdadero Rey eres tú!
Tú has puesto en mis manos el honor de tu voluntad. Cada palabra de tu revelación dice que me respetas y te confías a mí, me das dignidad y responsabilidad. Concédeme la santa mayoría de edad, que es capaz de aceptar la ley que tú guardas y de asumir la responsabilidad que tú me transfieres. Ten despierto mi corazón para que esté ante ti en todo momento, y haz que mi actuación se convierta en ese dominio y esa obediencia a que tú me has llamado.
Amén.”
Oraciones para pedirle y agradecerle
Cada vez que oramos y rezamos tenemos la gran oportunidad de decirle y expresarle a Dios todo lo que sentimos, ya sea todo lo que nos preocupa y también todo lo que nos alegra, aunque ya él está al tanto de todo pues todo lo sabe, pero desea que se lo comuniquemos.
La forma más fácil de orar es comunicarle todo lo que sentimos con la mayor sencillez posible siendo siempre humilde de corazón, teniendo siempre en cuenta que Dios siempre estará disponible para nosotros.
Cada vez que oramos Dios escucha mucho más de todo lo que decimos ya que la estamos dirigiendo directamente a él por lo tanto también responde mucho más de lo que pedimos y necesitamos.
Hay muchísimos tipos de oraciones, tanto sencillas como complejas, hay oraciones clásicas y también poco comunes pero es bueno siempre tener en conocimiento algunas fáciles de aprender y aquí la encontrarás.
Es muy importante que antes de que te vayas a dormir le agradezcas a Dios por todas las cosas buenas que te ha pasado en el día, así como también, por las cosas malas, pues a pesar de todo estas nos enseñan mucho y nos hacen mejores personas.
Antes de dormir, es recomendable que le pidas su bendición a Dios para que esté contigo y con aquellos a los que amas, en todas las adversidades con las que tendrán que lidiar el día que viene
